Las estadísticas señalan que la eficiencia del trabajador chileno equivale a la mitad del promedio que registran los países pertenecientes a la OCDE.
Quién no ha escuchado alguna vez la frase "el chileno es bueno para sacar la vuelta"? Más allá de las exageraciones, esa caracterización no es tan equivocada, ya que, según un estudio presentado este año por la OCDE, un trabajador local produce menos de la mitad que uno en EE.UU. The Conference Board aporta también que el chileno produce US$24,7 por hora trabajada, mientras que la media de los países OCDE es de US$49.
Según María Jesús García-Huidobro, gerente de márketing de Laborum Chile, "todos los vicios que perjudican la eficiencia son totalmente superables. En algunos casos basta solo un cambio de mentalidad para eliminarlos y enfocarse 100% en las tareas propias del día a día".
Si eres una de esas personas que se distrae hasta con el vuelo de una mosca, el portal de empleo te trae una serie de consejos para que aproveches al máximo el tiempo en la oficina y no tengas que hacer horas extras al sacar pendientes impostergables.
Jerarquiza: Si has estado evitando realizar ese eterno y complejo informe solicitado por tu jefe, no lo pienses más y métete de lleno para sacarlo adelante. Haz un listado en orden de prioridad de todas las tareas que tienes asignadas y cúmplelas una a una. Esto aliviará tu nivel de estrés y te permitirá reconocer tu nivel de avance.
Organiza tu tiempo: Si tienes por delante varias tareas a la vez, ordena tu agenda y dedícale un determinado plazo a cada una de ellas. Con esto, evitarás quedar "atrapado" en una sola de ellas, sin poder avanzar en las demás.
Ocupa la tecnología: Los recordatorios y las agendas online son una ayuda fundamental para ordenar los pendientes y para que nada se te escape del radar.
Establece metas: Dedica unos minutos al inicio de la jornada para establecer objetivos claros que estés dispuesto a cumplir.
No te distraigas: Bloquea las notificaciones en el teléfono que no sean "de vida o muerte" y evita a toda costa navegar por internet en sitios y páginas que no tengan directa relación con tu trabajo.
Ponte límites: Hay gente que no puede vivir sin café o cigarros. Si bien la idea no es eliminarlos completamente, sí puedes establecer un límite de consumo diario (realista) para que no dejes tu puesto de trabajo con tanta asiduidad.
Toma pausas: Aplica la Técnica Pomodoro para las tareas de mayor complejidad. Es un método de gestión del tiempo creado en los años 80 que consiste en segmentar la jornada en períodos de 25 minutos, con intervalos de descanso de cinco minutos entre uno y otro. A su vez, tras completar cuatro segmentos largos, se establece una pausa de descanso más prolongada.